Cuando la lucha por la igualdad vuelve a ser un peligro para la Iglesia

El pasado 17 de marzo el arzobispado de Caracas convocó a un encuentro (parecido al realizado en San Cristóbal hace 3 meses). El encuentro de “información y organización” planteaba los “desafíos de la familia” de hoy, pero llama la atención que la agenda no incluía temas como el alto índice de embarazos adolescentes, el abandono infantil, las muertes por abortos ilegales, la paternidad irresponsable, el VIH en mujeres casadas o en niños y niñas, ni siquiera los temas que nos aquejan a toda la población y la diversidad de familias venezolanas como lo son la inseguridad, el desabastecimiento, la delincuencia, no. El tema a debatir fue el “gran desafío de la familia” lo que a nivel mundial la iglesia católica cataloga como “ideología de género” y que Venezuela, según su máximo representante Jorge Urosa Savino, no está exenta de caer en esta especie de cataclismo histórico al que tanto le temen.

Es preciso aclarar que la verdadera “Ideología de Género” es la impuesta por corrientes de la iglesia católica y otras religiones fundamentalistas sin importar el sinnúmero de vidas afectadas, y que plantea que las personas nacen con ciertos genitales (pene y vagina), lo que indefectiblemente conlleva a una única e inmutable forma de ser, existir y amar. Un patrón de ser varón y ser hembra, cis-heterosexuado en contra de las demostrables expresiones y variaciones existentes a lo largo de la geografía e historia mundial.

Lo que hacemos los movimientos pro dignidad de todas las personas incluyendo las personas gays, lesbianas, bisexuales, transgéneros, transexuales e intersexuales ( LGBTI), no es promover ideologías, ni respaldar dogmas, promovemos la libertad de ser y vivir sin miedos, sin señalamientos, sin prejuicios que estigmatizan y generan estereotipos que vulneren la calidad de vida de las personas pues no encajan en los patrones esperados. No defendemos ideologías ni dogmas, defendemos la realidad, lo que existe, nuestra ciudadanía y nuestra dignidad. Sin vulnerar la ajena, salvo que se pone al descubierto que siguen errando como lo hicieron al oponerse a los derechos de las mujeres, a la abolición de la esclavitud, a la inclusión de los hijos e hijas habidos fuera del matrimonio, entre otros.

Estos líderes del patriarcado, el sexismo y la exclusión al diferente, lastimosamente con poder aun, están promoviendo el odio, adornado de amor a “la familia” (pero solo a la familia cristiana, claro está). Cuando se sientan a debatir el “alcance de la corriente LGBTI” como si se tratase de un Tsunami que viene a arrasarlo todo, es un claro mensaje de terror, que busca sembrar miedo, por lo tanto moviliza el odio y la hostilidad hacia nuestra naturaleza y dignidad.

Ahora imaginen ese discurso maximizado (pues ya existe, está en la norma, en la cultura) reproduciéndose con vehemencia sobre aquella masa de niños, niñas y adolescentes desde los espacios educativos privados y semiprivados (contradiciendo a la ciencia), haciéndo sentir como personas inhumanas, enfermas, depravadas, delincuentes, anormales frente a una clara mayoría de personas dignas y sanas: las normales, cabe preguntarse:

Queremos hombres y mujeres felices, desarrollándose libremente en una sociedad donde las diferencias se realcen solo para valorar la diversidad y no para condenarla? Queremos niños y niñas temerosos, sin autoestima, débiles, con ideas suicidas, victimas del vicio ante un mundo que le condena por ser como la naturaleza le hizo: diferente?

No continuemos volteando la cara como si no existiera, no sigamos haciendo invisible lo evidente. La vida de muchos hombres y mujeres está en nuestras manos. Consolidemos la paz, el amor y el respeto a todas las personas sin importar cuan distinta sean en función a nuestros propios patrones y no sigamos cayendo en las manos ensangrentadas aun de quienes envestidos de mentira y de una infinita ansia de poder, continúan enquistados en nuestro imaginario.

Giovanni Piermattei
Presidente AC Venezuela Igualitaria

Ver: Arzobispado de Caracas organiza el evento: “Desafíos a la Familia Hoy