¿No hay temas más importantes, como para que legisladores se ocupen de temas como el matrimonio civil igualitario?

¿No hay temas más importantes, como crisis económica, educación, salud, seguridad para que legisladores se ocupen de temas como el matrimonio civil igualitario?
Este argumento es terriblemente falaz, porque siempre podría usarse como excusa para frenar cualquier debate: siempre habrá algún tema más importante que el tema que sea que se esté debatiendo. Pero legalizar el matrimonio civil entre personas del mismo sexo es una tarea sencilla, que requiere apenas de un fallo del Tribunal Supremo de Justicia o de la aprobación de una ley de reforma parcial del código civil en la Asamblea Nacional, y de modo alguno impide, obstaculiza o demora la solución de ningún otro asunto. El TSJ o la Asamblea pueden aprobar el matrimonio civil entre personas del mismo sexo y también ocuparse de todos aquellos otros temas que son señalados como “más importantes”, sin que una cosa impida la otra. Pero, ¿quién dijo que este tema no tiene que ver con la educación? Educar a las futuras generaciones en una sociedad menos prejuiciosa y con igualdad de derechos nos hará mejores. Muchos jóvenes homosexuales sufrirán menos en la escuela, tendrán una adolescencia más feliz, crecerán sin miedo, sin odio, sin traumas, sin tener que esconderse en el armario. ¿Quién dijo que este debate no tiene que ver con la salud? Miles de parejas podrán acceder a servicios de salud a los que hoy no acceden por no poder casarse, y cientos de niños podrán ser beneficiarios del seguro de salud de sus padres o madres. ¿Quién dijo que este debate no tiene que ver con la seguridad? Los crímenes de odio que son cometidos en nuestro país, el odio y la discriminación que sufren muchas personas por ser gays, lesbianas, bisexuales, transgéneros o transexuales tienen mucho que ver con este debate. Además, siempre nos dirán que no es momento, que hay temas más importantes, que esperemos. Muchos han pasado la vida entera esperando. La democracia, que debe impulsar la igualdad ante la Ley de sus ciudadanos, tiene una deuda pendiente con las mujeres lesbianas, las personas trans, los hombres gays y personas bisexuales, y es hora de que empiece a saldarla. 
El Estado venezolano debe debatir, promulgar y extender derechos civiles a los grupos excluidos para que nuestro país siga entre de lleno al siglo XXI.

Preguntas y respuestas referencias a material de Bruno Bimbi para ayudar a esclarecer de qué se trata y por qué se pide este derecho para todos y todas.